El régimen de maquilas en Paraguay se ha consolidado como uno de los principales motores de las exportaciones industriales del país. Desde su regulación por el Decreto no 9.585/2000, las maquilas han crecido significativamente, representando en 2023 el 67% de sus exportaciones manufacturadas. Paraguay sigue una trayectoria similar a la de otras experiencias maquiladoras, como la de México y países asiáticos, combinando incentivos fiscales, mano de obra accesible y proximidad a grandes mercados consumidores. En este contexto, el presente artículo analiza la evolución de las maquilas paraguayas, sus impactos en la economía nacional, así como desafíos y oportunidades futuras. La investigación se basa en documentos legales, informes oficiales y pronunciamientos de autoridades paraguayas. Las principales conclusiones indican que el régimen maquilador ha jugado un papel importante en la industrialización y fortalecimiento del mercado laboral formal en las últimas dos décadas, con un énfasis particular durante el gobierno de Cartes (2013-2018). Sin embargo, además del bajo nivel de intensidad tecnológica, la concentración geográfica en las regiones fronterizas y la excesiva dependencia de los mercados mercosureños, uno de los grandes desafíos a superar es que la atractividad del régimen aún está fuertemente anclada en diferenciales de costos y fiscales, y no en bases más sólidas y a largo plazo. Finalmente, en cuanto a la constitución de ventajas competitivas duraderas, se señaló la necesidad de ampliar la participación de Paraguay en cadenas de producción extraregionales y impulsar su integración con los países vecinos a través de proyectos como el Corredor Vial Bioceánico.